2 oct 2010

De esos eternos lamentos


"Cuando se está enamorado empieza uno por desilusionarse a sí mismo, y acaba por desilusionar a la otra parte interesada."
-Oscar Wilde-


Cierto...cierto...terriblemente cierto.

1.- El amor hoy en día lejos de brindar alegrías a las personas que son cautivas voluntarias de ese bello/tormentoso sentimiento, solamente trae malos momentos llenos de intriga, dolor, desastre y un incisivo rendimiento a la melancolía. No he visto cartas de amor sin que lleven la palabra "lágrimas" en ellas.

2.- El amor, ahora desde otra idea, es amar lo que muchas veces no se puede ni siquiera mencionar. Llorar al cuadro de aquella realidad no es más que un acto que se repite sin fin. El amor es quizá la querencia más apegada al llanto que a un dichoso instante de eterna alegría.

3.- De aquellos versos que sonaban a cariño constante, se van tornando en textos incongruentes. Cómo amar sin sufrir y cómo sufrir sin amar? Ironía...

4.- Amoríos como antes ya no existen, solamente copias baratas. Hoy ese sentimiento es representado por el signo "$" y por lo que se obtiene de él. Quizá es que se ama ahora lo material más que a lo que trasciende a la materia.

5.- Querencia más pura es ésta que presume en estos tiempos de ser impura. Dónde están los tiernos relatos de amor a la hora de profesarlo? Dónde están aquellos valientes que daban la vida misma por aquél noble sentimiento? Quizá se han rendido de tanto esperar contestación a su llamado desde la parte más baja de la ventana.

Para amar se requiere de un pasaporte a un lugar muy lejano, y para ello se necesita comprar un boleto al ayer.

Hasta pronto.

2 comentarios:

Pistorius dijo...

Más cínicos y menos escolásticos. La pretensión te está llevando por los suelos.

El Conde dijo...

Ah...entonces ya estoy en el averno. Sinceramente no son días aptos ni para refutar ni para opinar cosas que no en mi caso. Gracias por tu opinión.