25 abr 2010

Domingo de letras


No voy a mentir, en todo el día no salí de mí casa. Lo cierto es que últimamente encuentro muy placentero quedarme en mí estudio los domingos, y es que no tengo la necesidad de nada de lo que el exterior me ofrece, lo tengo todo, buena música, buenos libros, buenos videojuegos, tele, arte, etc. Me gusta en verdad mí estudio.

Ahora bien, creo que aproveché bastante bien la mañana, ya que terminé mí "Discurso a los educadores", el cual llevo escribiendo desde noviembre y no había podido terminar. Del mismo modo, pude proporcionar más ideas frescas al ensayo "México, país del intento", creo que si alguien lo lee y se considera un patriota ferviente, terminará por recordarme a mí santa madre, ya que hablo con la verdad al máximo y no reparo en esconder detalles oscuros. Proseguí con "Más Platón y menos Prozac", debo decir que me sigue interesando mucho lo que plasma el autor.

A la hora de la comida, como me encontraba gracias a Dios solo en casa, ordené algo de alimentos gringos, lo cual me lleva a afirmar que esa comida mugre es muy buena cuando no se busca nada más que descansar. Nada mal, salvo que extraño el buen gusto de la gastronomía materna. Escuché un poco de Wagner antes de centrarme en la crítica a Nietzsche y a su lamentosa existencia.

Y ahora sin más por hacer, creo que continuaré con "Notas sobre el descaro popular", con el cual espero ganarme el desprecio de los sectores conformistas.

Hasta pronto.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Encuentro tan cómico como serío lo que escribes, me agrada que seas alguien que ahce lo que le enriquece si más. felicidades amigo te envido.
en cuanto a los ensayos; me gustaria tener los argumentos para recordarte a tu muy afortunada madre (jaja no me creas), claro eso solo si me permites leer lo que has escrito.
sabes que lo leere con respeto y procurare darte una opinion objetiva (si es que puedo dar alguna)

El Conde dijo...

Lalo, del mismo modo espero poder compartir contigo esos escritos, recibe un abrazo!!