Primero antes que nada debo aclarar, que este muchacho fue un gran defensor del tradicionalismo, siendo un destacado intelectual durante la España decadente de inicios del siglo XX. Sin duda afiliado al movimiento nacional durante la Guerra Civil.Su determinación y entusiasmo feroz por lo intelectual, lo llevó a ocupar durante el gobierno franquista en 1937 la Dirección de Bellas Artes. Es oportuno decir que al ser un nacionalista, con aires de conservador pero con dudosas conductas liberales, D'Ors generó a su alrededor confianza en ambos lados del tablero, aunque llegando a ser más exactos en cuanto a la historia, era más conveniencia que sensibilidad hacia un creer.
Una vez, haciendo gala de su puesto, llevó acabo una exposición de Arte Sacro en San Sebastián, con la esperada llegada del Generalísimo Francisco Franco para la inauguración de esta. Sin embargo, con el pretexto de que la guerra le mantenía muy ocupado (cosa que en verdad era cierta)no asistió. Un poco irritado por tan lamentable falta, D'Ors, que esperaba encontrarse con el máximo lider de las armas españolas (siendo este el máximo letrado del país), llegó a comentar algo parecido a lo siguiente:
"Esto me recuerda a Napoleón, ya que él, aunque estaba en plena campaña, decidió visitar al distinguido Goethe en Weimar. Claro que yo no estoy en el mismo alto nivel de Goethe...pero...¡Coño! ¡Franco tampoco es Napoleón!
Es bueno aclarar detalles siempre lo he dicho, pero...la verdad este sujeto mostró mucho valor al criticar a Franco de ese modo, ya que como muchos saben, "Cosa que me dices, bala que te contesto".
Hasta pronto.
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