Hoy de regreso a casa, me entretuve con una persona algo extraña y por supuesto ajena a mi vida (o al menos eso pienso). Me cuestionó si estaba feliz con mi vida, que si realmente estaba contento con lo que hacía y que de qué me servía tanta emoción por la vida. Primero no sé de dónde sacó que era feliz con mi vida (si lo soy, pero cómo lo supo), cómo diantres sabe que estoy contento con lo que hago o no, cómo me puede cuestionar sobre mi emoción de vivir sin conocerme y por último...quién demonios le dijo que me importaba escucharle?
Me molesté y le hice que se fuera porque estaba a punto de decirle una cuanta verdad (desgraciadamente o no, me contuve y se fue el miserable). Me enfurece que se metan en mi vida como si les invitara a que lo hicieran. Yo no me meto en la vida de los ajenos salvo que me lo pidan, por qué tendría que tolerar que alguien que ni conozco se atreva a cuestionarme cosas como esas?
Quizá me conozca, pero repito, yo a esa persona no.
Algo que me llamó la atención fue que en su chamarra tenía la siguiente pregunta: ¿Te suicidarías?
Mucha gente puede leer eso y le tirarán de loco, otros se cuestionarán y creo que fui víctima de ello, me lo cuestioné y terminé con los siguientes resultados:
-Si lo haría, siempre y cuando realmente no tenga de otra o simplemente perdiera la razón.
-No lo haría, porque sinceramente no tengo tiempo para hacerlo, tengo cosas más importantes en las que pensar así que ese pensamiento realmente sería el último tras una larga lista de cosas.
-Termino con la solución de que simplemente no lo haría, no tengo ni pistola ni balas, no tengo intención de comprar nada relacionado y para terminar de romper hacia la realidad...soy pobre y a penas me alcanza para un chicle.
Bastardo ese infeliz, me hizo perder el tiempo en una cosa que como siempre, termina rendida a la verdad de mi billetera vacía.
Hasta pronto.
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