Es una de las enseñanzas que guardo en le corazón desde que un buen amigo mío (de hecho profesor, de los mejores que he tenido) me dio cuando necesité ayuda en una etapa algo difícil de mi vida. Justamente eso fue antes de convencerme de que la vida es sencilla. No sé la verdad por qué hoy resonó de forma imparable en mi mente, pero lo que si sé es que me sigue ayudando para seguir luchando, seguir creyendo y seguir dando lo mejor de mi a los demás.
Espero que también esta enseñanza de la vida pueda llegar a tu corazón querido lector.
Sin más que decir.
Hasta pronto
1 comentario:
Totalmente de acuerdo contigo, muchas veces pasa en el mundo, por ejemplo lo que paso con el chavo de derecho, que por no haber renunciado al alcohol, no en un 100%, pero si de una forma responsable para que no tuviera que pasar por lo que sufrirá un tiempo, cuidense y sean responsables
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