Ya que terminé con eso de los principios, es momento de provocar en mis lectores muchas dudas y unos que otros golpes a la razón, ya que a continuación mencionaré algunos casos en los cuales, nuestra habilidad racional y sobre todo lingüística se ve seriamente perjudicada por no decir avergonzada.
Cuando vas por la calle, y te toca una lluvia extrema, aceptas de mala gana que te has empapado...llegas a tu casa y la pregunta de un tercero es: Te mojaste?
En otra ocasión, llegas de nueva cuenta a tu casa y la pregunta con la que te reciben es: ya llegaste?
Vas muy feliz, caminando junto con algunos amigos o conocidos o familiares, por mero accidente te tropiezas en la calle y caes sin piedad al suelo, la pregunta es directa: te caíste?
Estás degustando de una rica sopa, la cual está algo caliente, cuando llevas la primera cucharada a tu boca...te quemas sin dudarlo, y no podría faltar la pregunta: te quemaste?
Ahora bien, hay todavía cosas más letales en cuestión de la relación existente entre lo que se piensa y lo que se dice, a esto me refiero con las palabras que se nos suelen ir cuando queremos decir algo...pero decimos algo que simplemente no tiene nada que ver...
Suena el teléfono, vamos a contestar y lo primero que decimos es: Bueno? Si? Diga? ...hay unas que se acercan mucho a lo correcto, sin embargo...qué es correcto? en ningún lugar está establecido cómo se debe contestar en el aparato ese...verdad?
Cuando alguien nos dice algo...terminamos por contestarle con el famoso "ok". En realidad ese termino es de guerra, ya que cuando se contaban el número de muertes en el campo de batalla, siempre se decía el número y después la K. Ok esto no se está entendiendo, por ejemplo, supongamos que en una batalla murieron 7 personas, esto sería "7K" osea "7 Kills". Por supuesto esto es algo anglo-sajón. Y recurriendo a la santa lógica, cuando no habían muertos, pues era "OK".
Muchas groserías que se dicen, en especial en México, no tienen razón de ello, realmente se tomaron por que sonaban algo "fuertes". No pienso decirlas ya que pues de nada serviría, no creo que de la noche a la mañana se dejen de decir.
Podría continuar diciendo mucho sobre esto de lo que decimos o preguntamos, pero siendo muy franco, sería un abuso tremendo. No continuaré, lo dejaré para otra ocasión.
Hasta pronto.
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