Una semana más una semana menos...oh cruel destino que dañas nuestras vidas!!!
-Visión determinista-
El lunes por la mañana, tuve la oportunidad de desayunar con mis papás, un desayuno bastante satisfactorio acompañado por un debate sobre las ideas innatas. En definitiva caímos en la solución empirista a ello. Haciendo labores mañaneras, después de salir del banco, entré a un centro comercial cercano del lugar, y pude hacerme con una copia cinematográfica de "Shakespeare apasionado", donde encontramos a Jospeh Fiennes haciendo el papel del escritor inglés y a un amor mío platónico, Gwyneth Paltrow, es un filme que aunque no me atrapa mucho en la trama, levanta en mi el sentimiento de querer seguir escribiendo cosas que la gente llama cursis. De ahí en adelante solamente pasé la tarde probando los manjares de la vida ordinaria.
El martes me levanté todavía más temprano que de costumbre, ya que tenía una cita con la dama de mis pesadillas...las matemáticas. Me divertí con el buen Rello. Su amor por la matemática justificada con los filósofos racionalistas me ha hecho creer que todo se puede. De ahí me di una vuelta a Fundación Cedros, para encontrarme con la novedad de que mis alumnos están presentando exámenes, aquellos exámenes que parecían difíciles en secundaria, pero que pasando a prepa entendemos que eran una burla mal contada. Pasé un rato tranquilo en Arenales reflexionando sobre la vida sacerdotal. Encontré paz. Después visité Gandhi para ver qué me encontraba, y no salí desilusionado, ya que encontré una colección de ensayos filosóficos muy buenos y sobre todo...a excelente precio!!! la verdad una lágrima pudo adornar el panorama, pero ya era mucha subjetividad.
El miércoles, pasé decepción al saber sobre el estado de salud de un amigo mío, al parecer nada ha servido para curarle de su enfermedad. Comí en casa una deliciosa comida brasileña, que lejos de cumplir con dogmas de etiqueta gastronómica, lleva al hombre a cometer pecado de gula, suerte que tenía el compromiso de dar clases de catecismo, sino...quién sabe qué pudo haber pasado. Terminando la clase, me di una vuelta por Fundación Cedros, donde encontré a muchos conocidos, me alegró eso sin duda. Estoy comenzando a sentir una cruel decepción con algunos alumnos, ya que me están demostrando que realmente no quieren sobre salir...siendo franco me deprimo con solamente recordarlo.
Hoy jueves pues fue un día más y un día menos, cansado como los demás. Saqué a unos alumnos a preceptoría y pude conocer más sobre ellos. Tengo algo de nostalgia, no sé por qué pero la tengo...tal vez nostalgia de Dios. Acabaré, espero, mi ensayo sobre la libertad, en verdad siento mucho que Cuellar no esté por aquí para que me diera una opinión a su estilo sobre esto.
Viernes...otro día será.
Hasta pronto
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